Unicaja, hoy es el día

Se enfrenta al Barcelona con la obligación de ganar para jugar la fase por el título. Conseguirá la clasificación si logra la victoria, pero también si pierde y el Valladolid cae derrotado en su visita al Cajasol         

No hay vuelta atrás. Los valientes deben dar un paso al frente. Decididos, convencidos y seguros de conseguir su objetivo: ganar al Barcelona. El Unicaja juega hoy su partido 1.000 en la Liga ACB. Probablemente ningún aficionado recuerda cuál fue el 343 o el 781, pero el duelo de esta tarde quedará fijado en la memoria de todos pase lo que pase. Hay mucho en juego, quizá demasiado. Más allá de entrar en los 'play-off', el Unicaja pone en liza su historia y también su futuro más inmediato.

El desafío que tiene que afrontar el grupo al que dirige Chus Mateo es de primer nivel: derrotar al mejor equipo de la fase regular en su feudo. Pero no hay otra. Debe hacerlo para no estar pendiente de lo que ocurra en Sevilla. Si el Unicaja gana al Barcelona, estará clasificado para el 'play-off' de la ACB, algo que también puede conseguir incluso si pierde y el Blancos de Rueda Valladolid hace lo mismo ante el Cajasol. Podría ser incluso séptimo si vence y el Fuenlabrada pierde en su cancha contra el Joventut. Pero eso sería ya rizar el rizo. A estas alturas, y a pesar del potencial y el nombre que tiene el Unicaja, el objetivo mínimo se puede dar como bueno. Con ser octavos, basta.

La motivación del Unicaja es máxima, pero la ilusión choca con la realidad. Hay que ser consecuentes. El equipo malagueño solo ha ganado cinco partidos como visitante en lo que va de temporada y uno solo en los últimos siete desplazamientos a canchas mucho más accesibles que la de hoy. Para extraer algo positivo sí conviene resaltar que el Unicaja se quedó al borde de la victoria en Vitoria, Valencia, Sevilla o Gran Canaria. Hoy no hay lugar para las medias tintas y debe concluir el partido a su favor sin repetir los errores de esos encuentros.

Garbajosa celebra un triple durante el partido contra el Alicante [Foto: Diario Sur/ C. Moret]

Las claves

La pregunta es: ¿cómo puede el Unicaja derrotar al Barcelona? La respuesta no es fácil. El conjunto al que dirige Xavi Pascual -elegido ayer mejor entrenador de la fase regular- tiene la mejor defensa del campeonato, con 65,48 puntos encajados por partido. Si el encuentro se desarrolla con marcadores bajos, el equipo catalán tiene las de ganar. El CAI y el Bilbao, los dos únicos conjuntos que salieron victoriosos esta temporada del Palau, le endosaron 71 y 83 puntos, respectivamente.

En cualquier caso, está por ver si el Unicaja tiene argumentos ofensivos para plantear un partido con protagonismo de su ataque. Sería preciso un elevado porcentaje de acierto para plantarle cara al Barcelona, al que, por cierto, argumentos ofensivos no le faltan. La clave, sin duda, estará en que el Unicaja tenga eficacia en el lanzamiento de tres puntos, su dependencia de esta faceta del juego es vital, y lo será hoy también.

Sin perder de vista este aspecto, el Unicaja ha trabajado durante toda esta semana diferentes variantes defensivas encaminadas a frenar el perímetro del Barcelona, con especial atención, como siempre, a Juan Carlos Navarro. En este sentido, el equipo malagueño tiene en sus filas al hombre que mejor entiende el juego del catalán: Berni Rodríguez. Su papel en el partido será clave.

Pero a Berni se le acumulará el trabajo. Y es que el malagueño tendrá que compaginar sus labores defensivas con la de ayudar a Blakney en la dirección. La baja de McIntyre deja al estadounidense como único base puro del equipo, algo que seguro aprovechará el Barcelona para castigar al Unicaja. Finalmente, el canterano Pozas también será de la partida después de que los técnicos descartasen a Guille Rubio.

Fuente: Diario Sur